La agricultura ecológica ha ido creciendo rápidamente durante la última década. La producción, apuntando a trabajos orgánicos y ecológicos, viene aumentando año a año en el continente, siendo los invernaderos uno de los principales exponentes de esta iniciativa agrícola.
Agricultura ecológica
Este modelo busca enfocar la producción agraria con un mayor respeto hacia el entorno y producir alimentos sanos, de la misma calidad y con una cantidad suficiente. El objetivos es alcanzar la producción de alimentos sanos, utilizando a la misma naturaleza como modelo a seguir, y desde allí aunar toda la información que se tenga con los actuales conocimientos técnicos y científicos.
La agricultura ecológica posibilita la obtención de alimentos en su máxima calidad, eso se puede ver en la presentación del mismo y su sabor, como también en el contenido alimenticio. Uno de los grandes puntos es no producir impactos ambientales, y de esta manera se garantiza la continuidad de la producción agraria de la región.
Agricultura en invernadero
Uno de los aspectos que más se debe abordar, cuando se trabaja esta línea de invernaderos orgánicos y ecológicos, es la fertilización. Ante las variedades que se utilizan, pensando en los cultivos convencionales y su demanda de nutrientes, esta normativa de agricultura ecológica limita su uso y obliga a una mayor demanda del naturismo.
La solarización, el injerto y la biofumigación son algunos de los métodos utilizados para la desinfección del suelo en el uso del cultivo ecológico. El control de la temperatura y la luz, son vitales para darles un dejo de naturalidad a la semilla, de la misma manera que un control de hierbas. La tecnificación de los invernaderos para alcanzar esta actividad más orgánica y ecológica ha sido fundamental.
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